El azúcar, tu peor enemigo.

Durante mucho  tiempo se ha considerado a la grasa, como la responsable de todos los males relacionados con la obesidad. Conozco personas obesas, que no aliñan las ensaladas, “vaporizan” con aceite de oliva los alimentos antes de asarlos, cuentan las cucharadas de aceite que consumen durante el día, toman leches y yogures desnatados y quesos bajos en grasa. Sin embargo, siguen siendo obesos ¿por qué?

Por fin, este año la Organización Mundial de la Salud, alerta sobre el consumo excesivo de azúcar en la alimentación de nuestros días. La recomendación es no sobrepasar unas doce cucharillas diarias de azúcar. Esta cantidad puede equivaler a unos 50 gramos de azúcar diarios.

Es normal que pensemos “Ah, pues yo tomo menos, porque sólo me tomo tres cafés al día, y le pongo tres sobres”. Error. No sólo cuenta el azúcar que añadimos a los alimentos, también debemos incluir en el cálculo el azúcar contenido en todo lo que ingerimos. Por ejemplo, una lata de refresco, puede contener hasta 40 gramos de azúcar o una cucharada de kétchup, hasta cuatro gramos de azúcar.

Así que ahí van las recomendaciones:

-Evita los refrescos azucarados,

-No consumas bollería industrial, y no abuses de la bollería casera. De acuerdo que no lleva conservantes ni le añades grasas vegetales parcialmente hidrogenadas, pero también contienen azúcar, así que deja su consumo para ocasiones especiales.

-No abuses de la fruta. Una cantidad adecuada sería unas tres piezas de fruta al día máximo ( y evitando las frutas que estén demasiado maduras).

-Si te gusta el chocolate, consume el chocolate rico en cacao, de al menos 70%. Contiene más cacao y menos azúcar.

-Ojo con los yogures, pues también tienen un alto contenido en azúcares, actualmente puedes encontrar algunos que son 0% en materia grasa y además 0% en azúcares añadidos.

-Una advertencia: Los postres de chocolate light (“desgrasados”)….¡ENGORDAN!

Así que ya sabes, deja de contar calorías, olvídate de las grasas y empieza a tener en cuenta al azúcar.