El secreto, Alimentación y Deporte
A lo largo de estos años, me encontrado con personas que intentaban bajar de peso haciendo sólo dieta, o sólo deporte. El resultado, en la mayor parte de los casos, frustrante, tras un pequeño periodo inicial donde el cuerpo responde al cambio de hábitos, rápidamente, dejamos de ver resultados.
Muchas veces me preguntan si hay algún secreto para conseguir el peso ideal. Mi respuesta es siempre la misma, sí, con ejercicio y una alimentación adecuada, puedes conseguir tus objetivos.
Creo que el principal problema es que muchas veces no sabemos cómo enfrentarnos a la pérdida de peso, así que te daré un par de claves que creo que son importantes en este sentido.
Prepárate mentalmente. No empieces de hoy para mañana sin pensarlo. Medita tu decisión, y cuando tengas claro que quieres hacerlo, pon una fecha y comienza.
Define un objetivo alcanzable a corto plazo. Te pongo un ejemplo: Si peso 80 kilos y quiero perder 20kgs, el objetivo al principio puede parecer muy lejano y puedo desmotivarme con facilidad. Sin embargo, si decido que mi objetivo será llegar a los 75 kg, este objetivo resulta muy asequible, y cuando lo alcance estaré muy motivado.
No es sólo una cuestión de peso. Toma tus medidas de contorno, pecho, cintura, abdomen, cadera y muslo. El peso, a veces puede variar, si tenemos más o menos retención de líquido, si nos pesamos antes o después de comer, si nos hemos apuntado a un gimnasio al mismo tiempo que hacemos dieta,… Tras semanas de trabajo, puede ser frustrante ver unos pocos gramos de menos en la báscula. Así que toma como también tu referencia el volumen, valorarás tu pérdida de grasa, al fin y al cabo, ¡el objetivo debe ser alcanzar una talla, no un peso!
Si aún no practicas deporte, ¡hazlo! Inicialmente, si no sueles hacer ejercicio, te propongo, simplemente caminar. Tres o cuatro veces en semana, a buen ritmo, un mínimo de 30-40 minutos. Elige un momento que te resulte cómodo. Si no tienes tiempo hay opciones sencillas, lleva tu calzado deportivo al trabajo y al salir, vuelve a casa caminando, o ve directamente con tu coche a un sitio para caminar, etc. Si ya practicas deporte, y llevas tiempo haciendo lo mismo, cambia tu rutina. El cuerpo se acostumbra rápidamente y es necesario salir de la zona de confort.
Persevera. A veces, el cuerpo tarda en responder, no todas las personas son iguales, así que no te compares, ¡eres único!
Y por último, si caes, vuelve a levantarte, si te saltes un día la dieta, no te castigues, simplemente, ¡continúa adelante!